La pequeña Roma cumplía un añito y su madre quería una tarta muy especial, ya que nació durante la pandemia y el período de cerramiento, por ello debía llevar un arco iris como símbolo de los dibujos que hacían los niños para agradecer y animar.
Genial idea para ese primer cumpleaños.
La tarta sería de bizcocho de yogur y sabor a vainilla con baño de almíbar en cada capa y relleno de crema de chocolate y crocanti de almendra dulce, exquisito. Una vez cubierta de ganache de chocolate, y cubierta en fondanr de color rosa, solo faltaba adornar con unas nubes en una de ellas colocaría su nombre en dorado y al otro lado su edad, y un montón de estrllitas por todos lados.
Preciosa tarta y más preciosa la pequeña Roma con su tarta, que estaba riquísima como me comentó su mami.
Muchas Felicidades a la pequeña Roma, y muchas gracias a su mami por confiar en mi para este primer cumpleaños.
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