Mi tío Luis cumplía 70 años y sus hijos estaban preparándole una fiesta sorpresa en la que participaríamos familiares y amigos y por supuesto no podía faltar mi tarta, que esta vez sería de su equipo preferido su Real Madrid de su corazón, además tenía que ser espectacular.
La tarta sería toda comestible y llevaría dos pisos y un balón, que también sería comestible.
Los bizcochos serían de buttermilk y vainilla con sus rellenos favoritos, nata y crema de chantilli una combinación muy sabrosa, además con el almíbar que iba calado que era de mandarina le daba una suavidad al bizcocho genial.
Para empezar a adornar colocaría el balón que iría sobre una base de color verde simulando el césped del campo de fútbol, muy original.
La tarta principal llevaría dos pisos, el piso inferior iría forrado en blanco y en color negro le haría las rayas que caracterizan a la marca que viste el equipo del Real Madrid, además un gran escudo acompañaría la parte delantera de la tarta.
La parte superior también iría forrada de blanco con una tira negra y sobre este piso una bufanda como la de cualquier seguidor madridista con los colores del equipo y los colores de la bandera de España, espectacular quedaron los dos pisos de tarta y muy sabrosa como todos los asistentes comentaron luego al probarla.
En la unión de los pisos iría una tira de color verde simulando el césped del campo de fútbol.
Una vez colocado en la base que sería de color negro, un cartel en lila con el nombre del cumpleañero completaría el conjunto, precioso todo el conjunto.
Todos disfrutamos muchísimo de la celebración y de la fiesta, y por supuesto a todos le gustó al mezcla de sabores de la nata con el chantillí y el almíbar de mandarina sobre el bizcocho de vainilla.
Muchas Felicidades TITO y que cumplas por lo menos otros 70 más, un abrazo.
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